Aprovechando el gran tirón de la obra de Suzanne Collins y de su adaptación cinematográfica, una escuela de Largo, Florida, decidió organizar un campamento de verano inspirado en The Hunger Games. Pero aunque la idea fue un éxito y se cubrieron todas las plazas disponibles, los organizadores pronto descubrieron que la idea no era tan buena como habían pensado. Al parecer, el campamento tuvo que cambiar la temática al comprobar el alto nivel de violencia demostrado por los niños participantes. “Si tengo que morir, quiero que sea por un flechazo. No me matéis con una espada. Prefiero un balazo“, dijo Joey Royals, uno de los jóvenes participantes en este campamento en declaraciones a The Tampa Bay Times.
Ante este tipo de declaraciones, psicólogos y profesores se alarmaron y tras una semana decidieron cambiar el enfoque y centrarse en actividades de equipo y trabajo colectivo. Así que en vez de “matarse” unos a otros, ahora deberán trabajar en equipo para lograr su objetivo y evitar daños mayores.
La popular saga de literatura juvenil, llevada al cine con Jennifer Lawrence como protagonista, relata las hazañas de Katniss Everdeen, una joven de dieciséis años en un futuro posapocalíptico en el que niños y jóvenes de los diferentes son obligados una vez al año a enfrentarse en una lucha a muerte hasta que uno de ellos quede con vida. La primera película de The Hunger Games recaudó en los cines de todo el mundo más de 400 millones de dólares. La próxima entrega, En llamas, se estrenará en noviembre de este año.