Se avecina un futuro incierto para la que fuera la mansión de Versace en Miami Beach. La propiedad, conocida como Casa Causarina, fue comprada por Peter Loftin hace diez años por 19 millones de dólares y desde hace meses está en venta. Sin embargo, el problema del actual dueño es que está endeudado con los acreedores de la mansión y su situación financiera no ha hecho más que agravarse.
La propiedad se hizo famosa por el asesinato del diseñador italiano el 15 de julio de 1997, cuando Andrew Cunanan, un prostituto que se quitó la vida en un enfrentamiento policial, le disparó mortalmente en los escalones. Después del incidente, la familia de Versace vendió la mansión y el espacio se ha convertido en una atracción para los turistas que visitan Ocean Drive y se hacen fotografías en las escaleras. También ha sido club y restaurante privado y espacio de eventos, además de ser la residencia de Loftin. Pero ahora Loftin se ha declarado en bancarrota y no se sabe qué pasara con la lujosa finca.
