LeBron James (6), del Heat de Miami, clava el balón ante Kirk Hinrich, de los Bulls de Chicago, en el segundo cuarto del partido del domingo 14 de abril de 2013 en Miami. Al dar inicio la postemporada de la NBA, el Heat luce como amplio favorito a llevarse su segundo título consecutivo. (Foto AP/El Nuevo Herald, David Santiago) MAGS OUT
NUEVA YORK (AP) — Todos quieren encontrar una razón por la cual no pensar que el Heat de Miami ganará otro título de NBA. No hay necesidad de revisar las apuestas. El Heat es amplio favorito.
Tampoco hay que molestarse en ver los resultados del Heat, con apenas tres derrotas desde el inicio de febrero.
Y ciertamente tampoco hay que ver el despliegue del equipo en la cancha, donde LeBron James se cansó de recordar durante la temporada regular de que está en su máximo nivel y de antemano es el mejor del mundo.
Los únicos que podrían creer en que deben tener cuidado son el mismo Heat.
“Surgirán problemas y adversidades sin importar lo que suceda, sin importar qué tan buen equipo seamos”, dijo Dwyane Wade. “Habrá un momento en los playoffs en los que la espalda va a estar contra la pared. Y yo creo que todo lo que hemos hecho esta temporada nos preparará para ese momento. Tenemos una meta, al igual que todos los equipos que llegan a la postemporada, ganar un campeonato. Pero comprendemos el proceso que eso conlleva”.
Todo inicia el sábado, cuando los playoffs empiezan con cuatro partidos de primera ronda. El Heat iniciará su participación el domingo contra Milwaukee en la que se espera sea una serie breve.
Luego enfrentarán a otros como Knicks, Thunder, Spurs u otro rival, a fin de demostrar que los próximos dos meses no son tan solo una formalidad.
“Ellos tuvieron la mejor foja y son los campeones defensores, por lo que son el equipo a vencer, pero no creo que haya mucho más que eso”, dijo el entrenador interino de los Nets P.J. Carlesimo. “Es decir, hay que ser justos. Ellos cuentan con la mejor foja y son los campeones defensores, por lo que son el equipo que uno tiene que vencer, pero no, no creo que alguien sea muy superior a otro. Hay muchos equipos muy buenos”.
Nueva York, que ganó tres de los cuatro duelos que sostuvo ante Miami, recibe a Boston el sábado en el primer duelo de la postemporada. Los Nets son anfitriones de Chicago en el primer juego de playoffs en Brooklyn. En la Conferencia del Oeste, Golden State visita Denver y los Clippers y Grizzlies de Memphis se enfrentan en una revancha de primera ronda.
El domingo, los Lakers van a San Antonio sin Kobe Bryant, y los campeones defensores en el Oeste, Oklahoma City, enfrenta a la ex estrella del Thunder James Harden y el resto de los Rockets de Houston. Indiana y Atlanta se ven las caras en otra serie de la Conferencia del Este.
Miami batió toda clase de récords de la franquicia con una foja de 66-16.
Hay más intriga en el Oeste, especialmente en las series que involucran a los equipos de Los Angeles.
Los Clippers y Grizzlies se fueron al máximo de siete juegos el año pasado, con victoria final para los Clippers, que ahora tendrán ventaja de local.
En cuanto a los Lakers, su pase a los playoffs no fue asegurado hasta el miércoles. Pero ganaron sus últimos cinco partidos y lucieron peligrosos sin el lesionado Kobe Bryant debido a la presencia de Dwight Howard y Pau Gasol bajo los tableros.
Los Lakers y Spurs han protagonizado una de las mejores rivalidades de la NBA en la última década, y este pinta para ser otra serie memorable.
“Estamos extasiados de estar en los playoffs, pero no nos damos por satisfechos”, dijo Howard.
El duelo más destacado en el Este podría ser el Boston-Nueva York. Los Knicks pusieron fin al reinado de cinco años de los Celtics en la división del Atlántico. Nueva York ganó su primer título de división desde 1994, con Carmelo Anthony como campeón anotador de la liga (28,7 puntos por juego). Los Knicks deberán doblegar a un equipo que aún espera complicar con Paul Pierce y Kevin Garnett, y que quiere darle confort a su ciudad tras los ataques con bombas en el maratón de Boston.