OAKLAND, California, EE.UU. (AP) — El entrenador del Heat de Miami, Erik Spoelstra, y el presidente del equipo, Pat Riley, estuvieron un rato en el vestuario para entregarle a LeBron James el balón del encuentro del miércoles y reconocer su nuevo récord.
Los jugadores celebraron efusivamente en el centro del salón. Entonces, como Spoelstra dijo: “Todos han intentado algo contra él, un puñetazo, una mofa, un codo, cualquier cosa que pudieran hasta que él comenzó a responder”.
Eso es una pequeña muestra del daño que James ha infligido en el resto de los equipos de la NBA durante la última década.
James se convirtió en el jugador más joven en la historia de la NBA que anota 20.000 puntos y también rebasó las 5.000 asistencias en una noche memorable en la que llevó al Heat a una victoria por 92-75 sobre los mermados Warriors de Golden State.
En un gira que ha tenido más malas noticias que buenas, James modificó en parte esa situación y abrió un nuevo capítulo en los libros de marcas. Finalizó con 25 puntos, 10 asistencias y siete rebotes en sólo 30 minutos para sumar otro momento histórico.
“Esto significa todo”, dijo James. “Esto significa mucho. En primer lugar, como siempre digo, significa que he podido estar sano. Estar allí en la cancha y hacer lo que adoro hacer, me encanta el juego del basquetbol y trato de dar todo al juego. Y espero que me siga retribuyendo”.
James estableció esos dos hitos antes del medio tiempo, ayudó a Miami a ponerse adelante por 34 puntos en el tercer periodo y permitió al entrenador Erik Spoelstra descansar a los titulares —ahora sin discusión— durante el último cuarto.
Anteriormente, el jugador más joven que llegó a los 20.000 puntos fue Kobe Bryant, de los Lakers de Los Angeles, quien lo consiguió a los 29 años y 122 días de edad. James tenía 28 años y 17 días el miércoles.
Dwyane Wade colaboró con 15 puntos, ocho tableros y seis asistencias, mientras Mario Chalmers anotó 15 para el Heat, que había perdido tres de sus últimos cuatro fuera de casa.